Page 61 - Manuale di preghiere quotidiane e per ogni occasione (2014)
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RENOVACIÓN DEVOCIONAL DE LOS VOTOS
            8 DE DICIEMBRE

            Santísima e Inmaculada Virgen María, nosotros miramos a
            ti, humilde servidora del Señor, y contigo damos gracias al
            Padre por las maravillas que ha obrado en nosotras. Renova-
            mos nuestro Sí a su proyecto de salvación, por el que nos ha
            consagrado con la vocación religiosa como signos y portado-
            ras de su Amor a los pequeños y a los testigos del Reino entre
            los hermanos; renovamos, hoy, los votos simples de castidad,
            pobreza y obediencia, de acuerdo con las constituciones de
            las hermanas Misioneras de la Doctrina Cristiana.
            Enséñanos a vivir, fieles al Espíritu Santo, una vida simple y
            pobre, de trabajo y templanza, en el amor y el dialogo frater-
            nal, en la dedicación y la oración.
            Ruega por nosotros, Madre de la Iglesia: tú que has progresado
            en la fe y la caridad y vives en la gloria de Tu Hijo, haz que
            nuestro servicio sea fiel y generoso para que podamos alcanzar
            la alegría de la comunión plena en la casa del Padre. Amén.


            SÚPLICAAIAREINADELSANTOROSARODEPOMPEYA
            v. En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
               Amén

            Oh Augusta Reina de las Victorias, oh Soberana del Cielo y
            de la Tierra, en cuyo nombre se alegran los cielos y tiemblan
            los abismos, oh Reina gloriosa del Rosario, nosotros devotos
            hijos tuyos, recogidos en tu Templo de Pompeya, rebosamos
            el amor de nuestro corazón y con confianza de hijos te expre-
            samos  nuestras  miserias.  Desde  el  Trono  de  clemencia,
            donde estás sentada Reina, dirige, oh María, tu mirada pia-
            dosa sobre nosotros, sobre nuestras familias, sobre Italia,
            sobre Europa, sobre el mundo. Compadécete de los afanes y
            tribulaciones que amargan nuestra vida.  iMira, oh Madre,
            cuántos peligros en el alma y en el cuerpo, cuántas calamida-
            des y aflicciones nos apremian.

                                                                        ~
            MANl.JAL DE ORACIONES DIARIAS Y PARA TODA OCASIÓN
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